Compré en Okko un juego de cubiertos, se veían muy bien, eran un poco más caros de los que acostumbraba comprar, pero había decidido darme un pequeño gusto. Pensar en una mesa servida con platos agradables, vasos que no fueran los de la promo de Coca Cola, cubiertos un tanto mejores que los que compro en Jumbo. Se que como expectativa no suena demasiado pretenciosa, sin embargo alcanzaba para producirme cierta satisfacción pequeño-consumista. Fuí al local de OKKo de Av. Santa Fe, cerca de av. Pueyrredón. Recorrí sin prisa las diferentes mesas. Después de una negociación interna en la que evalué precio y diseño, decidí comprar unos cubiertos con mango negro, simil tramontina pero más sólidos y con unos muy bonitos circulos de metal. Fui a la caja, los pagué y me fui. Me dieron un ticket por la compra. A la semana empezaron los problemas. Un par de cuchillos comenzaron a perder parte de sus circulitos de metal, dejando a la vista las cabezas de unos tornillos con visibles muestras de oxidación. A las dos semanas, ya eran más los cuchillos "desdentados", mientras que el resto, mostraba oxido chorreado por debajo de estos mismos circulitos. Los circulos eran inoxidables pero los tornillos que cubrían no!!. En definitiva, el espectáculo de mi juego nuevo de cubiertos, sin siquiera un mes de uso, era lamentable, vergonzoso, infame. Fui al local de OKKO con los cubiertos.
Lo increíble es que estaba dispuesto a dejarlos para que les peguen nuevos circulitos de metal. Y no sólo eso, le plantee a la encargada del local que me contentaba con saber donde conseguir esos mismos circulos para pegarlos por mi cuenta. Sólo quería poder usarlos sin sentir cada vez que los viera, que me habían estafado en Okko. Estaba en eso cuando la persona que me atendía me señala un cartel que dictaminaba que no se aceptaban cambios sin el correspondiente ticket. Me pregunté,
¿Cuántos compraban algunos cubiertos en un lugar reconocido y guardaban el ticket pensando que deberían antes de un mes "hacerles un service"? no se trataba de computadoras, autos o televisores. Aduje que podían ver si estaba mi débito en sus registros, les señalé los cubiertos que aún mantenían a la venta. Los mios eran de la misma marca, modelo y estaban nuevos. De hecho, dudé que no hayan tenido el mismo problema antes. No hubo caso. Cuando me ofrecí a pegar los circulos yo mismo, me tomaron los datos y me dijeron que averiguarían si el fabricante podía darme alguna respuesta. Al tiempo, bastante tiempo, me llaman para decirme : "Lo sentimos, el fabricante está en China" y no me ofrecieron ninguna posibilidad de no sentirme estafado. Además, como si no supieran que el fabricante estaba en China cuando me tomaron los datos!!!! Sólo lo hicieron para que corriera el tiempo y no tuvieran problemas con mi reclamo. Al mes, visito otro de los locales de la cadena y veo, con un sentimiento de verguenza ajena, que vendían los mismos cubiertos que fallarían al poco tiempo de uso. Pensé en los numerosos compradores infaustos que estarían puteando a los tornillitos, los circulitos y al local de OKKO donde creyeron comprar cubiertos de aceptable calidad, y terminaron estafados.
Todavía espero una respuesta de los responsables de OKKO. La verdad es que para ellos solucionar este problema no les debe costar absolutamente NADA. Creo sin embargo que les va a salir infinitamente más cara, esta queja y las repercusiones que obtenga. Algo de lo que me voy a encargar personalmente.
Un estafado por OKKO
